Un mensaje espiritual de Aurora

“Saludos. ¡Soy Aurora! Hoy tengo un mensaje para vosotros los padres, abuelos y para aquellas muchas personas que dedican su vida a los niños.

Los niños nacen como seres espirituales y traen mucha sabiduría interior a esta vida. ¿Qué sucede entonces? En la escuela, como muy tarde, se les llena de asignaturas, materias y contenidos pedagógicos fundamentalmente orientados hacia lo intelectual. No obstante, esas energías no son coherentes con su estructura del alma, porque no están en armonía con ellos y, a veces, son más un estorbo que una ayuda. No obstante, forzáis a vuestros niños a este patrón de pensamiento y aprendizaje.

Somos conscientes del hecho de que solo algunos de vosotros podéis permitiros enviar a vuestros hijos a colegios privados o alternativos, aunque a muchos os gustaría hacerlo. Pero ¿qué cambiaría realmente si vosotros los adultos no cambiáis vuestra postura respecto al aprendizaje? ¿Qué cambiaría si seguís asociando el aprendizaje con alcanzar objetivos y con el éxito?

Las personas que rinden ganan dinero. Las personas que rinden cumplen las exigencias de la sociedad. Las personas que rinden encuentran valoración y respeto y, por ello, son capaces de alcanzar un cierto estatus. Eso pensáis, ¿no?

Nosotros, los Maestros Ascendidos somos muy conscientes del hecho de que uno no puede vivir del ocio, ya que nosotros también pasamos por muchas encarnaciones en la Tierra. Pero hoy os pido: ¡reflexionad sobre el tema del rendimiento una vez más!

¿Cuán actualizado está vuestro principio de rendimiento?

¿Cuán felices hacéis a los niños con él?

¿Cómo podríais redefinirlo?

¿De qué otra parte podríais extraer vuestra autovaloración, satisfacción, base financiera y vuestra felicidad?

Los Niños de la Nueva Era –vuestros hijos y los hijos de vuestros hijos– traen una serie de valores diferentes a esta vida. Os confrontan al negarse a participar en el principio de aprendizaje y rendimiento establecido. Se les llama ‘inadaptados’ o incluso ‘niños problemáticos o con problemas de conducta’. ¿Cómo describiríais vuestra sociedad orientada hacia los objetivos? ¿Esto no supone también un problema de comportamiento?

Permitámonos revisar el sistema educativo establecido: ¿no es hora de aprender a diferenciar entre los contenidos que son viejos y cargas inútiles y aquellos que son realmente útiles para los niños? No os obsesionéis con el transferir conocimiento tradicional y con la estimulación del intelecto; después de todo, a la sabiduría del corazón esto no debe pasarle factura. ¡Solo ella ayudará a la humanidad a sobrevivir! Vuestros hijos han traído mucho a esta vida. ¡No lo olvidéis! Soy Aurora. ¡Saludos!’’

© Mensaje transmitido por Ingrid Auer