“Yo, el maestro Djwal Khul, os saludo. Colaboro estrechamente con el arcángel Rafael y, entre otras cosas, me encargo de la sanación en la Nueva Era. Estáis viviendo un proceso de transformación cada vez más intenso. La vibración natural de vuestro cuerpo, vuestra frecuencia, se está elevando. Esto puede sonar muy técnico; sin embargo, es fácil de explicar.
Pensad en un estudiante de piano que practica la primera octava en su instrumento. Al principio no le resulta nada fácil, pero con el tiempo consigue tocar piezas sencillas en esta octava. Llega el día en el que el estudiante se cansa de la primera octava y le apetece tocar tonos más altos. Decide entonces practicar en la segunda octava, que vibra a un nivel más alto que la primera. Su repertorio se extiende, ya que esas dos octavas cuentan con más variaciones tonales.
¿Entendéis ahora la relación entre vuestro proceso de transformación y las octavas del piano? Cuanta mayor sea la vibración de vuestro cuerpo físico, mayor será la vibración de vuestra conciencia. Cuanto mayor sea vuestra conciencia, antes descubriréis y pondréis en marcha vuestras aptitudes espirituales, que habéis traído a esta vida como chispas de conciencia. ¡Vuestra espiritualidad interior está despertando!
Recordad: sois almas altamente desarrolladas en un cuerpo físico, y habéis ‘‘descendido’’ a la dualidad para tener ciertas experiencias que solo son posibles en este plano. Al mismo tiempo, el velo del olvido cubre vuestra conciencia, lo que hace que vuestra frecuencia vibratoria sea menor. Y os preguntaréis, ¿qué tiene que ver esto con los métodos de sanación de la Nueva Era?
Cuanto más elevada sea vuestra vibración energética durante este proceso de transformación, mayor deberá ser la vibración de los métodos de sanación y herramientas que empleéis. Solo si son acordes a vuestra frecuencia natural serán efectivos. Si las herramientas y métodos de sanación vibran a un nivel inferior al vuestro, no llegarán a vosotros y resultarán inútiles.
Pensad en los llamados ‘‘niños de la Nueva Era‘‘. Muchos de ellos nacen con un nivel de conciencia muy elevado y su cuerpo y su alma vibran en frecuencias muy altas. Por eso, cuando están enfermos, pueden no responder ni a los métodos y técnicas de sanación tradicional ni a los métodos holísticos de sanación. De esta forma obligan a sus padres y a su entorno a plantearse otras opciones, como son los métodos espirituales.
Este fenómeno será más palpable en los próximos años. Si trabajáis sanando a otras personas a nivel físico, mental o emocional, deberíais tener en cuenta que el nivel espiritual será cada vez más importante. Hasta ahora ha existido una negación de este nivel en los tratamientos y procesos de sanación.
Si sois pacientes y usuarios, considerad que los médicos, terapeutas y sanadores también deben experimentar un cambio de conciencia. Solo así serán capaces de satisfacer vuestras necesidades. Las personas que vibran a un nivel espiritual más elevado requieren herramientas y remedios de mayor nivel vibratorio, que alcancen la vibración natural del paciente para obtener efectos positivos.”
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